lunes, 14 de diciembre de 2009

Escritores de SADE Alte.Brown por el mundo

El color de los deseos

Cromática fuerza de eterno latido

Brumosas ideas de torsos desnudos

efluvios de nocturnos manantiales

...miedos de verdades elocuentes.

Cansadas miradas...

hendijas filtrantes de soles dormidos...

reproches de actos...

encantos sufridos...

voces y tactos,

perfumes y roces.

Puntillas y encajes.

Reversibles murmullos...

Sonidos de olvido.


Es un sueño evocador,

en ellos te veo,

detrás de los espejos...

en el color de los deseos.

Raúl Di Nucci Escritor SADE Alte. Brown

viernes, 11 de diciembre de 2009

Viejas máquinas de Editorial Guadalupe

Que innata mansedumbre tiene una publicación, doblamos , marcamos, subrayamos y hasta guardamos algunas hojas, sin importar quien delicadamente forjó esa edición. Nos interesa el autor, sus personajes, el comentario, las notas, o las síntesis para un futuro archivo.Qien hizo esto posible, poco importa.
En el S XXI a.d.C. Se escribía el primer libro,( historia mitológica sobre un rey de Uruk ). Hoy en el S XXI d.d.C. ¡CERRAMOS UNA EDITORIAL! Sigue sin importarnos la mano que hace el libro y la publica con todo lo que ella representa. un poema sin leer., un cuento sin divulgar, unos personajes sin conocer y unas manos , las del editor sin trabajar. De aquel primer libro rescato una frase- “ no le temo a la Muerte,le temo al olvido .”

Atrabiliario XXII


En el ángulo genuflexo

de la ventana

anida, el rayo mortecino

de un sol languidecente y vespertino.


La luz del candil

exuda, la convergente ampulosidad

de descompuestos rayos multicolores,

y a lo lejos

decadentes chalupas

improvisan una danza incoherente,

sobre labios salitres de ondas marinas.


Y en el varandal, supino

mi brazo, y enhiestas figuras

cruzan por la verca,

haciendo mas incomprensible

la hora fatal de un hado,

taciturno y mezquino.

Allá arriba, gárgolas y elfos

sonríen en urbano empíreo,

de mi atrabiliario dicterio.


Y aunque no entiendas estos versos,

no importa ser mas claro,

si sólo necesito que entiendas,

cuándo mil veces escribo,

en la solemnidad de los libros yertos.


Juan Manuel Caro Escritor SADE Alte. Brown