El misterio de la Goleta "Canuto" juanmanuelcaro

EL MISTERIO DE LA GOLETA CANUTO

Llegó a mis manos por casualidad, el libro del Capitán, como no puedo controlar mi curiosidad, ni mi genio de investigar, llegué  en una noche a repasar toda esta historia, del gaznápiro Capitán. En aquellas últimas páginas de la bitácora encontré lo siguiente: sucedió y lo dicen las cartas de navegación, ellas  son creíbles, e indiscutibles ,el Capitán y la Bucanera  de la Goleta “Canuto”, vivieron un amor intrépido a veces ,inusitado otras, su vida se desarrollaba  llendo al abordaje ,de otras naves, apoderándose de alhajas ,tesoros y tripulación, todo muy bien reseñado en el libro de navegación,  el reparto de lo obtenido, todo cuanto le correspondía a cada uno de acuerdo a su mérito, hasta los prisioneros vendidos como esclavos en alguna isla, o aquellos más hábiles y fuertes que quedaban bajo la tutela del Capitán y reemplazaban a otros que habían muerto o quedado maltrechos después de una intensa batalla en estas refriegas con piratas ,bucaneros,y corsarios,la perdida de un ojo un brazo o una pierna tenía su valor, que se pagaba de manera precisa y abultadamente, después  de lo cual ,el marinero dejaba el barco ,para radicarse en tierra y adquirir tierras, una plantación, una finca  o gastarla en juego y otras yerbas..En verdad la Bucanera  y el Capitán se amaban,, sin embargo, ella con el tiempo conoció en una de las ciudades del Caribe a un terrateniente, productor de  tabaco y azúcar, un caballero de cierto linaje,y ya cansada de la sal de alta mar , tomo sus cosas ,su dinero  y su barco y se radico en tierra para vivir una vida reposada y tranquila, cuidando de su hacienda y posteriormente de sus dos hijos, Mirna, la  del suave  perfume y el pequeño Manuel León,…De la vida del Capitán dicen otras crónicas que vivió , mejor dicho perduró, en sus correrías en alta mar, tocando puerto de vez en cuando, hasta que según los archivos de otros navíos, en una isla del Pacífico fue tomado cautivo, y sufrió una muerte parecida a la del Capitán Laffitte, los nativos entregaron los restos  a la tripulación, y estos como es la costumbre entre gente de alta mar ,se repartieron  en una ceremonia solemne en la borda, una a  una las pertenencias del Capitán entre los marineros, y quemaron su cuerpo ,con gran sorpresa  descubrieron que su corazón no se incineró, decidieron entonces guardarlo en una tina, y lo dejaron pendiendo de una soga  en el mascarón de proa…Pero allí no termina la historia, circula por las tabernas ,del Caribe cierta versión, que atestigua , que una noche  de mar sereno, la nave del Capitán se desamarró del puerto, y con la marea, del plenilunio,  comenzó a derivar por aquellas aguas empujada por la corriente, los marineros en su fabulación, cuentan, que la nave aparece de improviso  en el mar de los Zargazos, envuelta en la bruma, de aquel  solitario y tenebroso mar, crujen las maderas, inundadas de teredos  y algas ,golpean las cuerdas a babor y estribor ,las velas, degajadas, mientras un corazón y el repique de  de una apagada campana pregunta por la tripulación de la goleta “Canuto” y el destino de la antigua Bucanera.